Buscar este blog

El estudio de los catálogos de plantas ornamentales

 
      Una parte fundamental en el estudio de la flora ornamental de un área geográfica determinada, va a ser el análisis de la producción viverística (especies y variedades producidas en dicha área) y las especies y formas hortícolas comercializadas (por viveros que comercializan sus productos, pero tienen sus sedes en otras áreas geográficas, del mismo país, o de otros países). 
      Mi experiencia en estos años de estudio de la flora ornamental española, me indica que la flora ornamental de un área geográfica determinada, suele estar compuesta por un grupo elevado de especies que se mantienen en cultivo en el tiempo, perfectamente adaptadas por los años de cultivo al clima y al suelo, y que se van repitiendo año tras año en producción en los viveros de la zona, y frecuentemente, en el caso de especies de fácil cultivo en maceta o en jardín, van siendo multiplicadas por los particulares. Junto a estas, encontramos parte de especies muy raras en cultivo, que pueden corresponder a antiguos cultivos desaparecidos o frecuentemente a introducciones puntuales. Estas introducciones puntuales, de especies que proviene del mundo del viverismo, en ocasiones pasan a formar parte de la flora cultivada.
     El análisis de los catálogos nos permite datar de forma exacta la introducción de nuevas especies y variedades, lo que puede ser útil en un futuro para el estudio de la flora cultivada,  fundamental para el estudio de las formas y variedades hortícolas tradicionalmente cultivadas en un área geográfica determinada, si nuestro objetivo es la protección, evitando su desaparición en cultivo. Igualmente podemos decir de las especies ¿cómo podemos determinar si se trata de un antiguo cultivo? Podemos decir que con el análisis de la bibliografía relativa a la flora cultivada, bibliografía que tendría que corresponder a otras épocas históricas, más o menos a alejadas en el tiempo de la nuestra. Por desgracia, el estudio y análisis de la flora ornamental española en otras épocas ha sido fragmentario. En contraposición a otros países europeos, como Inglaterra, Francia o Alemania, este país no cuenta (teniendo en cuenta toda su historia botánica) con ningún botánico de prestigio que se haya dedicado en exclusiva, o la mayor parte de su obra al estudio de la flora ornamental, siendo la mayoría de libros y artículos publicados meras "anécdotas" dentro de la obra de estos autores. Es en este siglo donde encontramos algunas obras destacables, como la Flora Ornamental Española de José Manuel Sánchez & al.
      En el caso del estudio y catalogación de las formas hortícolas, la aportación de la botánica española, salvo algún caso destacable, como el de Simón de Rojas Clemente, ha sido igualmente fragmentario por no decir inexistente. Algo lamentable.
     Durante los últimos años, he tenido la suerte de poder ir configurando una amplia colección de catálogos de viveros españoles, del periodo 2001-2013, con más de 1000 volúmenes, al igual que una colección con más de 100 catálogos y otros documentos de viveros españoles y extranjeros (redactados en castellano) del siglo XIX y la primera mitad del XX (colecciones que van creciendo día a día) , lo que en los últimos años me está permitiendo ahondar en el estudio de las variedades hortícolas cultivadas/comercializadas en España en este periodo histórico. Estos dos grupos de documentos me está permitiendo por un lado, descubrir numerosas especies y formas hortícolas que han desaparecido en cultivo, y de las que no se tenía noticia en España, y por otro detectar numerosas especies y formas hortícolas cultivadas todavía en la actualidad presentes en catálogos de otras épocas, datos importantes, por ejemplo, para la creación de colecciones de variedades de plantas antiguamente cultivadas, bancos de germoplasma, o por ejemplo de cara a la restauración correcta de jardines históricos, teniendo en cuenta tanto especies como formas hortícolas. 
     Debemos tener en cuenta, que son muchas las especies que se cultivan a través de numerosas formas hortícolas que van apareciendo y desapareciendo en el mercado (y físicamente) rápidamente (lo que no supone necesariamente que desaparezcan en los jardines y en colecciones de plantas en macetas), y de los que en muchas ocasiones no quedaría constancia a no ser por los catálogos publicados en papel. Hoy en día de cualquier vivero medianamente destacado, podemos encontrar en internet su  producción viverística, con datos en muchas ocasiones acerca de la historia y la morfología de un cultivar, pero es un medio constantemente cambiante, con información que se va adaptando rápidamente, aunque en ocasiones he podido encontrar publicados en internet los catálogos en papel. Frente a esto, el estudio de los catálogos impresos, permite el análisis exacto de la producción de un vivero en una época determinada, y en un área geográfica determinada. Igualmente permite el análisis de la producción de pequeños viveros que en muchas ocasiones no presentan al público catálogos atractivos, con formato y editados como libros, como suelen hacer los grandes viveros europeos, y algunos españoles. 
     La información que nos proporcionan muchos de estos catálogos es muy importante pues frecuentemente nos muestran fotografías (prácticamente siempre, si se trata de un nuevo cultivar introducido en el mercado), pequeñas descripciones y condiciones de cultivo especificas de cada cultivar.          
 
 
Portada del catálogo, de 1927, del vivero valenciano "Jardín de San Valero. Grandes cultivos de árboles frutales y forestales. Semillas de flores y hortalizas" (documento original propiedad de D. Guillot).

 
 
Portada del catálogo de la Casa Veyrat  (1925?) "Grandes cultivos hortícolas y agrícolas. Árboles, plantas, semillas. Casa Veyrat" (documento original propiedad de D. Guillot).
 
 

No hay comentarios:

Publicar un comentario